Eleanor Kaplan (mayo 2022)

Antes de llegar a España, estaba preocupada por la comida. Tengo alergias al gluten y lactosa y por eso, a veces es difícil encontrar comida que pueda comer. En los Estados Unidos, conozco las opciones y los restaurantes, así que las alergias son bastante fáciles de gestionar. Sin embargo, no sabía cómo se tratarían en un nuevo país.

Aprendí rápidamente que no era tan difícil como pensaba. De hecho, la situación con las alergias puede ser mejor en España que en los Estados Unidos. Cuando voy a restaurantes, normalmente hay pan sin gluten y leche sin lactosa. Podía comer con mis amigos en las restaurantes, algo que a veces no es posible en los Estados Unidos.

Sin embargo, se debe tener cuidado porque no es totalmente claro lo que contiene alergias a veces. Por ejemplo, aprendí (por desgracia) que la salsa de las patatas bravas contiene gluten. Siempre tienes que preguntar. Por ejemplo, existen lugares en los que la salsa se hace sin gluten, así que es posible disfrutar de la comida tradicional aún con las alergias.

Busqué varios lugares muy buenos para los que padecen alergias. Primero, Celisioso es una panadería que lo hace absolutamente todo sin gluten. Tiene desayunos muy buenos, bollería e incluso sirve la cena. Hay varias ubicaciones pero la mejor está cerca del Retiro porque se puede estudiar en la planta baja.

Las croquetas son muy populares en Madrid, y me sentía un poco triste de no tener la oportunidad de probarlas. No obstante, descubrí un restaurante que se llama “Solo de Croquetas” que sirve solo croquetas sin gluten. Tiene una lista de los otros alérgenos disponibles.

En general, Madrid es una ciudad muy accesible y agradable para los que tienen alergias. El pan sin gluten es el mejor que he probado en mi vida. Casi siempre hay opciones, y si no las ves en la carta, solo hace falta preguntar a los camareros y normalmente darán con una solución rica.