Por Neve Wallace
Es muy abrumador tener que conocer una ciudad entera en cinco meses (en mi caso, dos). De hecho, es difícil saber por dónde empezar. Claro, es necesario visitar los museos- Prado, Reina Sofia, y Sorolla-; es necesario pedir sugerencias a tu familia y amigos que han viajado a Madrid; es necesario pasar tiempo en los mercados, parques, y plazas más populares de Yelp. Pero, la verdad es que estas visitas proliferan un sentimiento de ser turista.
Mi consejo es para los días en los que quieres sentir que Madrid es TÚ ciudad, y quieres actuar como si fueras madrileño. En mi caso, descubrí una estrategia que me ayudaba a reducir todas las opciones a solo las opciones que me interesaban. Mi clave, aunque es un poco vergonzosa por su singularidad, me funcionó a la perfección… Cada vez que tenía tiempo libre, buscaba en Google un tipo de lugar (café, plaza, bar etc.) y siempre añadía el adjetivo “hipster”. Es ridículo, yo lo sé – pero me funcionaba. Muchas veces adjuntaba algunos barrios en la búsqueda para especificar. Para mí, me di cuenta que “hipster” era la palabra que las críticas usaban para describir el tipo de ambiente que me gustaba en Madrid. La clave no es usar “hipster”, es averiguar el adjetivo que funciona para ti. Pero, mis tardes favoritas empezaron cuando busqué “hipster cafés”.
Estas búsquedas específicas me llevaron a las tardes que más voy recordar y agradecer. Uno de mis cafés favoritos se llama “HanSó Café” y el blog “Me gusta mi barrio” lo describe como un café “de especialidad y aires asiáticos”. La comida es una fusión de sabores españoles y asiáticos. Todas las tostas son especialmente ricas; de hecho, solté un soplido cuando tomé una por primera vez. Y unos minutos después, pedí otra. También, la carta de bebidas deliciosas es muy amplia. Y en Madrid, nada es mejor que empezar una tarde con una tosta y un café especial. Después de esas comidas, pasaba por los barrios alrededor del café, visitaba las tiendas y las boutiques, miraba la arquitectura y observaba a la gente. Descubrí mi plaza favorita por esta estrategia.
La idea de esta manera de conocer la ciudad no es hacer las cosas más españolas posibles. Es hacerlas cotidianas sin sentirte como un turista; sin esforzarte mucho, vas a descubrir nuevas partes, personalidades, y sonidos y vistas de la ciudad cada vez. Cuando pasas una tarde inspirado por tu adjetivo elegido con tranquilidad y curiosidad, es cuando sientes que Madrid es tuyo. Esto es uno de los sentimientos más satisfactorios de “study abroad”.